La Voz Diaria “No tendrás dioses ajenos delante de Mí.” – Éxodo 20:3

 

La Voz Diaria 18-12-2025

“No tendrás dioses ajenos delante de mí.” – Éxodo 20:3

“No te inclinarás ante ellos ni les servirás, porque yo, el Señor tu Dios, soy un Dios celoso.” Éxodo 20:5a

Señor, ¿realmente te buscamos a diario y confiamos en ti para nuestra vida y bienestar? ¿O tenemos otros dioses a los que adoramos y en los que confiamos para nuestra salvación, nuestras finanzas y nuestra salud?

Jesús habla:

Les pido a cada uno que me busquen con todo su corazón, mente, cuerpo y alma. No se conformen a este mundo, sino transformense mediante la renovación de su mente para que comprueben cuál es la buena, agradable y perfecta voluntad de mi Padre. ¿Cómo podrán renovar su mente si dedican tan poco tiempo a mi Palabra, meditando en ella y aplicándola a sus vidas? La clave del éxito en cada área de la vida es ponerme a mí y a mi palabra en primer lugar, y aplicarla a sus vidas. Sean hacedores de la palabra y no solo oidores. Los constructores sabios edifican su casa, sus vidas, sobre la obediencia a mi palabra. Los necios oyeron la palabra, pero no la pusieron en práctica. El secreto está en la obediencia. Recuerden, prefiero la obediencia al sacrificio.

Muchos buscan dioses falsos para salvarse. Recurren a brujos o siguen alguna nueva ciencia o enseñanza espiritual. He advertido sobre estas cosas en mi palabra. Recuerden que si no es conforme a mi palabra, no hay luz en él. Si la luz que parece tener es oscuridad, entonces ¿cuán grande es esa oscuridad, porque creen que es luz? Yo soy la luz del mundo. El que a mí viene no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de las luces. Me entristece que tantos hayan sido engañados. La serpiente ha desviado sus mentes de la sencillez que hay en Cristo.

La solución está en buscarme con todo su corazón. La solución está en dejar a un lado estos nuevos dioses falsos y venir a mí con todo su corazón, alma y mente. Yo soy el Dios de toda carne. ¿Hay algo demasiado difícil para Mí? Si me buscas con todo tu corazón, me encontrarás. Mientras busques tu salvación fuera de Mí, no la encontrarás. Búscame a Mí, el autor y consumador de tu fe. En Mí hay plenitud de vida, vida abundante. Todos los demás caminos conducen a la muerte.

Vengan a Mí todos los que están cansados ​​y agobiados, y Yo les daré descanso. Carguen con Mi yugo y aprendan de Mí, porque Mi yugo es suave y Mi carga ligera. Sigo llamando. ¿Por qué buscan ayuda de quienes no son dioses? ¿Pueden los dioses de estas naciones y pueblos que los rodean salvarlos? ¡Oh, todos los sedientos, vengan aquí al agua, a las aguas de vida, a Mi palabra! Beban y se sacien, y hallarán alimento para sus almas y salud para su cuerpo, pero no quisieron. En la quietud y la confianza estará su fuerza. En otras palabras, al pasar tiempo en meditación silenciosa conmigo, serían salvos, sanados, ayudados y encontrarían soluciones, pero no quisieron. Te apoyaste en tu propia prudencia, como el rey Saúl, y confiaste en el brazo de la carne para salvarte, pero no servirá de nada.

Arrepiéntete y regresa a tu primer amor, a Mí, el Cordero que fue inmolado desde la fundación del mundo. Yo soy quien puede salvarte. Yo soy quien puede traerte salud, riqueza y bienestar. Pero debes buscarme a Mí ante todo, antes que a cualquier otro dios o diosa. Es volviendo a Mí con todo tu corazón, mente, cuerpo y fuerzas que encontrarás la salvación. No hay otro nombre bajo el cielo en que puedas ser salvo sino en Mí. Ven a Mí, Jesucristo, el Mesías, y remontarás alas como águilas; correrás y no te cansarás. Caminarás y no desmayarás. Tu salud brotará rápidamente. Pero debes escuchar diligentemente mi voz y prestar oído a mis mandamientos, y hacer lo que es recto ante Mis ojos. Ningún otro dios puede salvarte, solo Yo. Yo soy el camino, la verdad y la vida. Nadie viene al Padre sino por mí. Ven, te espero.